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URUGUAY
LLEGO A SAN FRANCISCO: (Esta es la segunda de una
serie de notas, en la que seguiremos día a día, La delegación tuvo cambios de avión en Miami y Chicago, y mañana harán el cruce del océano Pacífico, con un par de escalas adicionales para instalarse en Melbourne. A regañadientes del Comité Olímpico Uruguayo, que hizo todo lo posible para evitar pagar el viaje de una delegación tan numerosa – 12 jugadores, 1 técnico, 1 kinesiólogo y 1 delegado – los campeones sudamericanos están ya en camino a la pretenciosa intención de retener la medalla de bronce ganada en Helsinski. LA PRACTICA EN SAN FRANCISCO - El equipo pudo realizar su primer entrenamiento, desde su partido de Montevideo, en el Olympic Club de San Francisco y lo hicieron luego del equipo brasileño, que también está en viaje hacia Melbourne. “Impresionaron bien, son los mismos hombres que vimos en el 54 cuando salieron vicecampeones mundiales”, escribió el técnico uruguayo, Héctor López Reboledo. Desde la partida de Montevideo el equipo no había practicado. “En Chicago, se prefirió que los muchachos no desaprovecharan las únicas cuatro horas que tuvieron disponibles para dormir efectivamente en una cama” explicó López. “Cansados de nubes, queremos tierra. Caminar en tierra, comer en tierra, dormir en tierra”, agregó. Héctor Costa, el capitán del equipo, se unió al coro de quejas por el inevitable viaje: “Llevamos casi cinco días sin dormir en una cama”. Desde Montevideo los uruguayos realizaron escalas en Porto Alegre, San Pablo, Río, Manaos, Miami y Chicago.
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